Las recompensas de la jardinería son excelentes: aire fresco, ejercicio, belleza y relajación, por nombrar algunos. Pero comenzar su primer jardín puede parecer una tarea abrumadora. Afortunadamente, los jardines son creaciones sorprendentemente indulgentes, y la mejor manera de aprender es simplemente zambullirse. Aquí hay 10 consejos para ayudar a comenzar un nuevo jardín con el pie derecho.
Conozca su sitio
Tómese su tiempo para familiarizarse con su propiedad antes de comenzar un nuevo jardín. Aquí hay algunas cosas que le gustaría probar mientras conoce su paisaje:
- Pasee tranquilamente por su propiedad con un cuaderno y haga un bosquejo de las áreas de plantación existentes.
- Agregue notas al “mapa” de su jardín sobre qué áreas reciben más sol y cuáles están sombreadas.
- Una simple prueba de suelo de su centro de jardinería local le dirá si su suelo está bien equilibrado en nutrientes y pH.
- Si está pensando en cultivar comestibles (vegetales, frutas o hierbas), es una buena idea hacer una prueba de plomo en su suelo.
- Enumere qué plantas y características existentes (como cercas o caminos) le gustaría conservar y cuáles deben reemplazarse o eliminarse.
- Pase tiempo simplemente pasando el rato en su jardín. Déjese soñar despierto y vea si se presentan ideas creativas.
Determine su estilo y objetivos
Reúna algunas imágenes que lo inspiren y busque un tema. ¿Te atraen los exuberantes jardines llenos de flores o los espacios modernos al aire libre más definidos? Es útil combinar algunas palabras con las imágenes que ha elegido, así que trate de encontrar algo que evoque el tipo de jardín que desea, incluso si no es un término de estilo “oficial”.
Por ejemplo, quizás decidas que tu estilo es Industrial Zen o Playful Modern o Simplified Cottage. Mientras se da cuenta de esto, es útil tener una foto del exterior de su hogar a mano: cualquier estilo que elija debería funcionar bien con el estilo arquitectónico de su hogar, así como sus preferencias personales.
Una vez que haya nombrado su estilo, tómese un momento para anotar las actividades y características que imagina disfrutar en su paisaje. Si tiene hijos, es posible que necesite mucho espacio abierto para correr. O tal vez sueñas con relajarte en medio de un gran prado de flores silvestres; sea lo que sea, escríbelo.
Comenzar pequeño
Soñar es maravilloso, pero cuando llega el momento de comenzar a cavar en la tierra, es igualmente importante mantenerse en la realidad. Cuanto más grande sea el jardín, más tiempo y energía necesitará para mantenerse. Examine lo que quiere (por ejemplo, un huerto) y luego reduzca la escala (por ejemplo, plante una cama elevada en lugar de seis). ¡Siempre puedes expandirte el próximo año!
Esto también es válido para la compra de plantas: es fácil dejarse seducir por las abundantes plantas en el vivero y volver a casa con demasiadas. Recuerde, la siembra lleva tiempo, así que compre solo lo que pueda obtener cómodamente en el suelo en el próximo día o dos.
Hacer un plan
Incluso si está plantando solo un lecho elevado de vegetales o un grupo de flores en macetas en el patio, tener un plan es clave. Si no está seguro de qué plantas comprar, haga un viaje de “investigación” a un vivero local (¡sin comprar nada!) Y tome fotos de las plantas que le gustaría considerar agregar a su jardín. Mire las etiquetas y anote cuándo florecen, así como los requisitos de sol y agua.
Reunir esta información en un plan esbozado (no se requieren habilidades artísticas) inicialmente lleva más tiempo, pero al final creará un jardín más exitoso. Elija plantas que florezcan en diferentes estaciones para obtener un color durante todo el año, y asegúrese de elegir plantas con requisitos similares de sol y agua para plantar juntas.
Elija las herramientas adecuadas para el trabajo (sin ir por la borda)
Tener las herramientas adecuadas hace que las tareas del jardín sean más agradables, pero no piense que necesita comprar la tienda el primer día. Solo unas pocas herramientas y suministros deben mantener su jardín funcionando sin problemas. Los conceptos básicos incluyen:
- Guantes de jardinería. Elija un par que se sienta cómodo y que proteja contra las espinas.
- Pala. Esto es esencial para preparar camas de jardín de gran tamaño y para cavar hoyos para árboles, arbustos y plantas grandes. Una pala con punta puntiaguda es más versátil que una pala plana.
- Llana y herramienta para desmalezar (o un cuchillo de jardinero japonés). Use estas herramientas para cavar agujeros para plantar y sacar las malas hierbas en la raíz.
- Larga manguera de jardín y boquilla de pulverización. Seleccione una manguera lo suficientemente larga como para llegar cómodamente a cada una de las áreas principales de su jardín.
- Podadora de mano. Las cortadoras afiladas pueden cortar ramas y cortar plantas leñosas como el romero.
- Rastrillo de metal. Use esto para esparcir mantillo y preparar camas para plantar.
- Rastrillo de hojas. Use un rastrillo flexible de plástico o bambú para recoger las hojas.
Mezcle plantas perennes y anuales
Un error común de los novatos es tomar demasiadas plantas de la sección “anuales” en el vivero, creando un jardín que muere en un solo año. Para la longevidad y el color, opta por una mezcla de plantas perennes (plantas que vuelven año tras año) y anuales (plantas que florecen y mueren en una sola estación).
Repetir, repetir, repetir
Una excelente manera de darle a su jardín un aspecto profesionalmente diseñado es repetir las mismas plantas y materiales de jardinería en diferentes lugares del paisaje. Evite elegir una planta de cada tipo, ya que esto tiende a parecer desordenado; incluso en un jardín de estilo cabaña inglés salvaje, las plantas se ven mejor cuando se repiten o se plantan en racimos. Lo mismo ocurre con otros materiales: elija solo unos pocos materiales de paisajismo para senderos, macetas, macetas y muebles de exterior, y repita, repita, repita.
Combina semillas y comienza para una mezcla asequible
Comenzar un jardín completo a partir de semillas puede ahorrar dinero, pero también puede ser increíblemente frustrante. Comprar solo plantas iniciadas no solo es costoso, sino que también puede limitar su elección de qué cultivar. La mejor opción suele ser una combinación de los dos: Recoja algunas plántulas iniciadas en su vivero local y comience algunas de las suyas a partir de semillas. Las buenas plantas para comenzar a partir de la semilla incluyen lechuga, rábanos, frijoles, girasoles, caléndulas y cosmos.
Cultiva lo que te gusta
Esto suena completamente simple, pero es algo que incluso los jardineros más experimentados a veces parecen olvidar. ¿Por qué cultivar calabaza si no es realmente tu favorito? A lo largo de los años, hemos dejado de molestarnos en cultivar frijoles y calabacines, en lugar de dedicar más espacio en el jardín a los favoritos de la familia como guisantes, rábanos, col rizada toscana y mini calabazas.
Promueva su educación en el jardín
Buscar talleres locales es una forma maravillosa de aprender más sobre jardinería y conectarse con otros jardineros en su comunidad. Consulte los viveros de plantas, los jardines comunitarios y los jardines botánicos en su área para ver talleres gratuitos o de bajo costo sobre una amplia gama de temas, como la jardinería en macetas, el uso de plantas nativas, la atracción de polinizadores, la creación de un jardín con agua y el compostaje.
La jardinería es una experiencia de aprendizaje para toda la vida, e incluso los jardineros más experimentados están aprendiendo todo el tiempo, así que no se castigue si parece que hay mucho que saber. Simplemente comience en algún lugar y tómelo una temporada a la vez. Lo maravilloso de la jardinería es que generalmente hay espacio para rehacer.